Los del Psoe acusan a los del PP de insultos homófobos y machistas en las Redes, mientras que los del PP les acusan de "querer instauran un férrea censura, al más puro estilo comunista"
Por otro lado, Manuel Baltar, se dirije "directamente" al presidente del gobierno diciéndole que "necesitamos más coordinación, más ayudas y menos propaganda".
El Partido Socialista y el Popular en la provincia de Ourense, entraban en el día de hoy en una espiral de acusaciones mutuas intentando desviar con ellas la atención y lejos de trabajar en lo que realmente interesa en estos momentos a los ciudadanos en general, a los autónomos y a las empresas.
Así, los del Psoe ourensano denuncian los, según ellos, “vergonzosos insultos homófobos y machistas” del exsubdelegado del Gobierno en Ourense durante el ultimo gobierno del Partido Popular, Roberto Castro, en los que ataca dicen los socialistas, vilmente al actual ministro del Interior, Fernando Grande- Marlaska, con insultos que además son aplaudidos por el actual vicepresidente de la Diputación Provincial y secretario general del partido, Rosendo Fernández, quien participa en el “lamentable festival homofóbico” a través de los ‘me gusta’ en un mensaje publicado en la cuenta de Facebook de Castro.
Según los socialistas, Castro se refiere a Grande- Marlaska cómo “ese de la voz aflautada que parece una cupletista que dirige ( lo de dirigir eres un decir) él Ministerio del Interior”.
Los socialistas reclaman al presidente provincial del PP, Manuel Baltar, que “ponga coto” a estos ataques personales contra la orientación sexual de las personas, vertidos por militantes y altos cargos de su partido.
El PSOE ourensano reclama a Castro “un mínimo de decencia y una disculpa” así como una “acción contundente frente a estas actitudes perjudiciales” por parte de los dirigentes del partido en el que militan el exsubdelegado del Gobierno y el vicepresidente de la Diputación. “Cualquier ataque o discriminación basado en la orientación sexual e identidad de género de las personas está perseguida por la legislación, y a pesar de los avances alcanzados en los últimos años, estas conductas bochornosas siguen siendo una de las formas de odio más extendidas”, explican los socialistas por lo que instan a “dejar de lado de una vez por todas estos ataques vomitivos y formas de discriminación”.
Ante estas acusaciones, los del PP, en voz de su secretario general, Rosendo Fernández, dicen que el responsable del PSOE en Ourense obliga a los afiliados a que difundan los contenidos de sus redes sociales ante el fracaso de sus perfiles y denuncian la actitud del secretario provincial del PSOE, Rafael Rodríguez Villarino, a quien acusan de “querer instaurar, al más puro estilo comunista, una férrea censura prohibiendo la libertad de expresión y la crítica política a filiados populares, mientras obliga a los militantes socialistas a difundir los contenidos de sus redes sociales ante el evidente fracaso de sus perfiles”.
Rosendo Fernández defendió así al exsubdelegado del Gobierno en Ourense, Roberto Castro, “objeto de las críticas de un profesional del insulto y la mala educación, que como cualquier ciudadano es libre de expresarse”, en este caso sobre la polémica campaña para contrarrestar el clima contrario a la gestión de crisis por parte del Gobierno de Pedro Sánchez.
El secretario general de los populares ourensanos rechazó con absoluta contundencia la censura que quiere imponer Villarino “no solo a un cuidadano que no ocupa cargo político alguno y que tiene el mismo derecho a expresar sus opiniones e ideas como cualquier otro, sino también a una formación política, el Partido Popular de Ourense, a cuyas redes sociales somete a un exhaustivo seguimiento para encontrar cualquier disculpa que le sirva para saciar su instinto destructivo y su ansia de protagonismo”.
Fernández dijo lamentar profundamente que en un momento tan difícil y complejo por el que está pasando la ciudadanía debido a la crisis sanitaria, “tengamos que perder minutos valiosos en desmentir las patrañas, falsedades y denuncias ridículas a las que solo ha dedicado su tiempo el secretario provincial del PSOE desde que comenzó el confinamiento”.
Mientras tanto,Manuel Baltar "regaña" al presidente del Gobierno desde FEMP.
El presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar, pidió «directamente» al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «más coordinación, más ayudas y menos propaganda, en la crisis del COVID-19”.
Lo hacía en la videoconferencia que mantuvo la Junta de Gobierno de la FEMP con el jefe del Ejecutivo. Baltar demandó “mayor liquidez para las entidades locales, los autónomos y las Pymes, que debieran ser beneficiarios directos de cooperación por parte del Gobierno”, y defendió que este es el momento “de la conectividad, de las personas y de los territorios, en donde una situación extraordinaria requiere de un presupuesto extraordinario”.
Baltar dijo en el encuentro telemático que las provincias “no solo somos circunscripciones electorales» y añadió que, como diputación, “nos hemos visto abocados a comprar material sanitario y lo entregamos a la Xunta de Galicia para su reparto entre todos los ayuntamientos; una cooperación que mantenemos a través del Puesto de Mando Avanzado”, y reclamó la necesidad de liquidez para una situación excepcional como esta: “Son cero euros los que han recibido los ayuntamientos, y desde instituciones como la nuestra nos tenemos que dedicar a cuestiones que nada tienen que ver con nuestras competencias, pero este dramático escenario requiere de la máxima diligencia y cooperación”.
Baltar finalizó avanzando que en el próximo pleno de la Diputación “no habrá inversiones en obras porque la prioridad hay que focalizarla en las personas, en el dinamismo empresarial, en la creación de empleo, en los autónomos y en las pequeñas y medianas empresas», dijo.
