Destacan que el proyecto para restaurar la senda fluvial de Matamá, en la zona especial de conservación río Támega, es un ejemplo del compromiso de las administraciones locales con este tipo de espacios.

La Xunta concederá este año ayudas a cerca de medio centenar de concellos para financiar estudios y diferentes inversiones dirigidas a la conservación, recuperación y rehabilitación del patrimonio natural y cultural localizado en la Red Natura 2000 de Galicia. Así lo anunció la directora xeral de Patrimonio Natural, Marisol Díaz, que visitó el concello ourensano de Laza para acercarse hasta la senda de Matamá, en plena ZEC del río Támega, y conocer de primera mano la zona en la que se ejecutará uno de los proyectos subvencionados por su departamento.
Acompañada por el delegado territorial de la Xunta en Ourense, Manuel Pardo, y el regidor municipal, José Ramón Barreal, la directora xeral explicó que la semana pasada fueron notificadas las ayudas concedidas al amparo de la orden de subvenciones bianual convocada en enero por la Xunta y cuyo objetivo es preservar y mejorar los espacios Red Natura de la comunidad. Los 48 concellos que resultaron beneficiarios, según explicó, recibirán un importe total de cerca de 1,5 millones de euros, fondos que permitirán ejecutar actuaciones para el arreglo de elementos como fuentes, molinos o lavaderos pero también otro tipo de intervenciones de carácter medioambiental.
En este sentido, Marisol Díaz se refirió a la restauración y acondicionamiento de la senda fluvial de Matamá que acometerá el Concello de Laza como un ejemplo de las actuaciones que se pretende apoyar desde la Xunta a través de este tipo de ayudas y del compromiso de las administraciones locales gallegas con la puesta en valor de los espacios Rede Natura localizados dentro de sus términos municipales. En este caso concreto, se indica que el Gobierno municipal resultó beneficiario de una ayuda de 30.000 euros para acometer estas obras (15.000 euros para este año y otros 15.000 euros para el que viene), lo que supone el 100% de la inversión prevista. Según figura en el proyecto, el objetivo es poner en valor la senda que discurre a un lado del río Támega, actuando en un tramo de aproximadamente 850 metros en el que confluyen numerosos valores naturales, paisajísticos, patrimoniales y etnográficos, haciendo a la vez posible su recorrido para personas con movilidad reducida. A tal fin, se harán labores de desbroce en el camino y poda manual de árboles, se estabilizará el muro de mampostería y se instalarán siete bancos de granito, además de renovar la señalización de la zona y mejorar el aparcamiento disuasorio.