Las Unidades de Intervención Policial esperaban este lunes a los doscientos bomberos comarcales que trajeron a Ourense las protestas del colectivo.
Las protestas de los bomberos de los parques comarcales de Galicia llegaron este lunes a la Diputación de Ourense, después de haber comenzado el viernes, día 20, por la de Pontevedra. También en Ourense se produjeron cargas de la Policía Nacional, en una de las cuales resultó herido un bombero del parque comarcal de Ribeira que hubo de ser evacuado en ambulancia. Lo que provocó momentos de tensión con los manifestantes increpando a los agentes de la policía a gritos de «asesinos, asesinos».
Antes del comienzo de la concentración, un fuerte dispositivo policíal ya blindaba el Pazo Provincial, sede de la institución ourensana, desde primeras hors de la mañana. Varios vehículos de las Unidades de Intervención Policial se desplazaron a esta ciudad para, según se indicó, asegurar el acceso a la sede de la Diputación. Lo que no evitó que las protestas dejaran daños en la entrada del Pazo Provincial, según denunció el propio presidente de la institución.
Las movilizaciones del medio millar de trabajadores de los parques comarcales de Galicia, llegan tras aguardar desde marzo el colectivo por el inicio de la revisión de sus condiciones de trabajo, y hallarse en huelga indefinida desde el pasado junio. Tras haber sido plantado el Comité por los presidentes de las diputaciones en dos ocasiones, al menos, y en sendas reuniones (la última de ellas el pasado día 9 en el Consello Galego de Relacións Laborais), los trabajadores decidieron endurecer las medidas de presión al considerarse abandonados tanto por las diputaciones gallegas como por la Xunta de Galicia. Tras la de este lunes en Ourense, el viernes toca la de A Coruña.