El fin de etapa cambia del barrio de San Francisco al Seminario Mayor.
El próximo 4 de noviembre la 75ª edición de ‘ laVuelta‘ ciclista a España llegará a Ourense en una etapa con meta en el Seminario Mayor.
Esta alternativa -la meta estaba inicialmente prevista en el alto de la calle Pena Trevinca, a la que los ciclistas accederían después de recorrer las calles más céntricas de la ciudad- fue propuesta por el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, para cumplir con las restricciones a las que obliga la pandemia de la Covid19 y evitar aglomeraciones en el núcleo urbano.
Integrantes de la organización de laVuelta se desplazaron ayer a la ciudad para reconocer esta alternativa in situ, que consideraron “espectacular” en el plano deportivo y de retransmisión televisiva: el Seminario Mayor es un emplazamiento ideal para observar la ciudad a vista de helicóptero, aseguraron. La propuesta de Pérez Jácome incluye también la aproximación a meta: en vez de entrar por el barrio de A Ponte y recorrer el centro de la ciudad, el pelotón accederá a la meta desde la N-120, pasando bajo los puentes más significativos de Ourense. Además, los últimos 900 metros -de los casi 200 km que recorrerán los ciclistas desde Lugo- cuentan con desniveles entre el 8% y el 9% desde el barrio de Vista Hermosa, y el trazado hasta el Seminario es idóneo para un final de etapa.
La organización de laVuelta considera que esta nueva variante permite cumplir con las restricciones sanitarias -evitar aglomeraciones y público en los últimos metros- y es compatible con las necesidades de la organización, ya que el campo de fútbol de las instalaciones del Seminario puede acoger toda la caravana ciclista.
Pérez Jácome asegura que “no hay mal que por bien no venga”: y es que Ourense, junto con Madrid, será la única gran ciudad con final de etapa, lo que garantiza “una notoria repercusión mediática” al tiempo que se evita cualquier riesgo para la ciudadanía.
La caravana de laVuelta, por su parte, tiene sus propias medidas de seguridad frente a la Covid19, ya que todos los integrantes realizan pruebas PCR, y atraviesan el país en una suerte de ‘burbuja’.
