El llamado "poder municipalista de progreso" se reúne para hacer frente a la "letalidad y al caciquismo caduco de Feijóo y Baltar".
Los socialistas gallegos reunieron en Ourense al llamado «poder municipalista de progreso», frente al “caciquismo” y la “letalidad” que representan, según ellos, Alberto Núñez Feijóo y Manuel Baltar.
Una cumbre municipalista que comenzaba a primera hora de la mañana con una foto de familia ante las fuentes de las Burgas y con un paseo por la zona histórica de la capital.
En el encuentro participaron el candidato a la presidencia de la Xunta y secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero; el secretario provincial, Rafa Villarino; Abel Caballero, alcalde de Vigo; Inés Rey, alcaldesa de A Coruña; Lara Méndez, alcaldesa de Lugo; Xosé S. Bugallo, alcalde de Santiago; Ángel Mato, alcalde de Ferrol; Alberto Varela, alcalde de Vilagarcía; Valentín G. Formoso, presidente de la Diputación de A Coruña; Carmela Silva, presidenta de la Diputación de Pontevedra y José Tomé, presidente de la Diputación de Lugo, así como candidatos al Parlamento de Galicia en las elecciones autonómicas.
Gonzalo Caballero aseguró que “los gobiernos municipales socialistas en los concellos y diputaciones de Galicia representan progreso, bienestar, estabilidad y oportunidades para la ciudadanía”, antes de resaltar “un gran acuerdo del Partido Socialista para abrir una etapa de progreso y bienestar al frente de la Xunta de Galicia en sintonía con los alcaldes, alcaldesas, presidentes y presidentas de las diputaciones”. “El 55 % de los gallegos y gallegas tienen hoy un alcalde o alcaldesa socialista y el ánimo conseguido hace un año en las elecciones municipales, nos dan fuerza para abrir ahora una nueva etapa también en la Xunta”.
Tras la cumbre municipalista, Rafa Villarino dijo que el “poder municipal socialista” representa “el avance y el progreso que por desgracia no tenemos en Ourense” y “por eso el día 12 de julio tenemos la oportunidad de hacer cambiar la realidad en esta provincia que está en manos de un baltarismo que ahora extendió su poder hasta el concello de Ourense”. “Es tiempo de cambiar, de mudar, de hacer que la esperanza venga para esta tierra y el 12 de julio es momento oportuno”, aseveró antes de concluir asegurando que “no podemos quedarnos atrás” por lo que “es el momento de que Ourense cambie”.
Todos los socialistas gallegos arroparon al secretario provincial del PSdeG en Ourense, ante los últimos ataques del llamado por ellos “ baltarismo más caduco”, después de ser destapada la “trama de privilegios en las subvenciones a pymes y autónomos” en el “peor momento de la historia del caciquismo con un PP ourensano en descomposición tras el pacto de la vergüenza con Jácome y luego del destrozo en votos desde que Manuel Baltar heredó la Diputación, quien pierde 17 votos cada día”.
