Ahora le tocó el turno a la calle Santo Domingo debido a unas obras en la fachada del edificio de Hacienda.
Con motivo de las obras que tendrán lugar en la fachada del edificio de Hacienda en la ciudad de Ourense, mañana, jueves 10 de agosto, y pasado mañana, viernes 11, la calle peatonal de Santo Domingo permanecerá cerrada al tráfico rodado en el acceso desde la calle Concordia. El horario del cierre, según el concello, será de 7:30 a 16:00 horas, por lo que se solicita a todos los vehículos que acomoden su trayectoria a las condiciones de la vía.
A este cierre de la calle Santo Domingo hay que sumar los de la Avenida de La Habana, Florentino Cuevillas, Parque de San Lázaro, Ramón Cabanillas, Celso Emilio Ferreiro y Bedoya, con lo que el centro de la ciudad de Ourense queda prácticamente cerrado al tráfico y con difícil acceso para los peatones.
Las obras permitirán una mejora de la seguridad en los pasos de peatones de la zona centro, además de otras mejoras en el pavimento, en la señalización y en el entorno de los pasos de cebra, ya que se instalarán en ellos un sistema de balizas luminosas intermitentes que se activarán mediante sensores volumétricos situados en las señales. Esas luces, situadas en el suelo, se encenderán cuando detecten a un peatón a punto de cruzar para advertir a los conductores que pasen por la calle en ese momento.
Desde la oposición hablan de un «colapso de tráfico sen precedentes»
La acumulación de obras en el centro de la ciudad de Ourense demuestra la «improvisación» con la que trabaja el gobierno municipal. Así se pronunció el PSOE con un comunicado en el que su concelleiro, José Ángel Vázquez Barquero, alerta de que «gran parte da cidadanía verá impedido o acceso en vehículo aos seus domicilios padecendo, por outra banda, o ruído derivado das obras e un colapso do tráfico sen precedentes». A la vez que lamentan, por otra parte, que el Concello haya perdido la oportunidad de dar prioridad a los peatones y que se haya dado protagonismo al asfalto.
Desde el BNG también mostraron su preocupación por las obras que se están ejecutando en el centro de la ciudad. Los nacionalistas hablan de una «situación caótica» y centran sus críticas en la falta de seguridad. Piden al alcalde que actúe y que obligue a las empresas adjudicatarias a tomar medidas en esta materia, que impidan el tránsito de personas ajenas a las obras y que se garantice el acceso de los servicios asistenciales y de emergencia en caso de ser necesario.