fueron instruidas diligencias judiciales por alteración del orden, atentados contra la autoridad o delitos de tráfico, entre otros.

La Policía Local de Ourense detuvo a cinco personas este fin de semana, del 27 al 30 de julio , por alteración del orden público, atentados contra la autoridad o delitos de tráfico, entre otros motivos. Pasadas las 14.30 horas del sábado, 29 de julio, se requiere la presencia de la Policía Local a causa de un incidente en un autobús urbano provocado por un varón, de 65 años, que estaba alterando el funcionamiento del servicio cuando este transcurría por la calle Curros Enríquez y se negaba a abandonar el vehículo, increpando el propio conductor. El viajero transportaba dos bultos con animales vivos -gallinas-, y se negaba a abandonar el autobús, llegando a agredir y a morder -en una mano- a uno de los agentes de policía que acudieron al lugar. Ese mismo día, a las 21.00 horas, agentes de la Policía Local atendían una llamada sobre una fuerte discusión en un piso turístico en la calle Sáenz Díez, denunciando que los usuarios estaban echando objetos por la ventana hacia un patio común. Los demandantes no quisieron presentar denuncia, pero sí solicitaron que una de las tres personas implicadas abandonara el lugar, ya que presentaba claros síntomas de embriaguez. Sin embargo, los agentes descubrieron, después de realizar las pertinentes identificaciones, una petición del Juzgado del Penitenciario de Madrid para su inmediata detención y puesta a disposición judicial.

En la madrugada del domingo al lunes se produjeron dos incidentes más. El primero, a las 4:26 horas, cuando en colaboración con la Policía Nacional localizan y detienen en la calle Río Arnoia el presunto autor de una agresión con arma blanco: el lesionado presentaba un corte desde la nuca hasta la nariz y otros cortes en el brazo y en el antebrazo, en el pecho y en una pierna. El segundo ocurrió a las 8.50 horas de este lunes, 31 de julio, en la avenida de Portugal, cuando los agentes detienen a un varón de 37 años que circulaba de forma errática por el centro de la ciudad. Además del conductor, en el vehículo viajaban seis personas más. Cuando la Policía Local intercepta el vehículo, el conductor rechaza las pruebas de alcohol y de drogas y agrede a los dos agentes.

Controles de tráfico.

Por otra parte, en diferentes controles realizados en calles de la ciudad, la Policía Local denunció tres delitos contra la seguridad vial -un conductor que había perdido la vigencia de su permiso; otro que no tenía permiso de conducir, y un tercero que le había prestado el vehículo a otra persona, sin carné, para conducir en su lugar-. Además, cinco conductores fueron denunciados por circular bajo los efectos del alcohol y otros tantos por hacerlo bajo los efectos de las drogas.

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