Con la tala se pretende evitar el riesgo de caídas.
El concello de Ourense procederá a cortar las palmeras del entorno de As Burgas (4 ejemplares) y de la praza del Bispo Cesáreo (2 ejemplares) tras constatar que se encuentran muy afectadas por la enfermedad del picudo rojo, y para evitar daños personales y materiales ante el riesgo de caída.
El concello apunta que la arboleda y las palmeras ubicadas en zonas urbanas son un elemento fundamental dentro de los muchos que componen la ciudad, llegando a ser algunos ejemplares un elemento distintivo y, a su vez, un gran reclamo turístico. Por esto, y después de la detección de la presencia de estos insectos en 2018, estas palmeras fueron objeto de tratamientos paliativos a base de productos fitosanitarios mediante endoterapia o inyección en el tronco. Sin embargo, los técnicos municipales certificaron esta mañana la muerte de estas palmeras y desde la Concellería de Medio Ambiente se decidió actuar con rapidez tratando de minimizar el riesgo de caída.
El picudo rojo es un un coleóptero de origen tropical, originario del sureste asiático y de Oceanía que se desarrolla en el interior de las palmeras, pudiendo coexistir al mismo tempo sus cuatro estados -huevo, larva, pupa y adulto-, y que en los casos más severos termina con la muerte de los ejemplares.
El concello estudia ya la plantación de nuevas especies, pero siempre garantizando la viabilidad de los ejemplares plantados sin que exista una dependencia de tratamientos químicos. Estos árboles serán seleccionadas en función de criterios agroclimáticos, grado de tolerancia a la sequía y a las temperaturas que se registran en Ourense ciudad, el tamaño de crecimiento aéreo y altura total del ejemplar, medidas de la copa, tamaño y tipo de crecimiento del sistema radicular -para minimizar los daños en pavimentos, aceras e infraestructuras-, rapidez de crecimiento, tolerancia a las podas, longevidad y otros valores estéticos.
