Serían para la empresa concesionaria de los centros deportivos de Eiroás y Oira y todo ello debido a las pérdidas sufridas debido al Covid.

 El Concello de Ourense podría tener que indemnizar con casi 300.000 euros a la empresa concesionaria de los centros deportivos de Eiroás y Oira, indemnización derivada de los perjuicios económicos que les ocasionó el cierre de su actividad durante la pandemia de la COVID-19. Así lo determina el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Ourense en una sentencia que estima el recurso presentado por la empresa, y del que dio cuenta la Xunta de Goberno en su reunión semanal de este jueves.

La resolución judicial declara la imposibilidad temporal de ejecución del contrato de esta concesión administrativa, en el periodo comprendido entre el día 13 de marzo y el 21 de junio de 2020 a consecuencia de la situación de hecho creada por la COVID-19 y de las medidas adoptadas por las diferentes administraciones para combatirlo, incluyendo el Real Decreto 463/2020 por lo que se declaraba el estado de alarma. Y reconoce a la empresa el derecho a que se restablezca el equilibrio económico del contrato de concesión. La sentencia fija dicha compensación en 297.313 euros, que tendría que afrontar el Concello de la ciudad.

El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, recordó que dicho contrato proviene de la etapa del bipartido en el Concello, PSOE y BNG, con los nacionalistas al frente de esta área. Y recuerda el actual regidor que siempre cuestionó aquella decisión, y que «de aquellos polvos vienen estos lodos», señala. En cualquier caso la sentencia aún no es firme, cabe recurso y el Gobierno municipal anuncia que recurrirá.

 Jácome rebate a Moure: la ayuda de la Xunta era inejecutable

Así mismo, el alcalde de la ciudad, Gonzalo Pérez Jácome rebatió este jueves los argumentos de la concelleira popular Flora Moure, otrora responsable del área de Termalismo del Concello, tras acusar al alcalde de haber desaprovechado una subvención de la Xunta de Galicia para reformar As Burgas. Pérez Jácome recalca que la subvención «era inejecutable, porque las obras manejaban unos plazos que excedía el que la Xunta fijaba para llevarlas a cabo», 6 meses, exactamente.

Jácome acusa a la edil popular de practicar la «hipocresía», máxime, le recuerda, cuando entonces la Concellería de Termalismo estaba «bajo su mandato».

Categorías: Noticias