En el acto se resaltó a Blanco como "ejemplo de valores deportivos y compromiso con una tierra que fabrica medallas".
El presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, recibió el Premio Ourensanía 2021 en el transcurso del tradicional y solemne acto que se celebra en el Teatro Principal de la ciudad coincidiendo con la festividad de San Martiño, patrón de Ourense, y que contó con la participación del presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar, y el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo.
Alejandro Blanco recibió el Premio Ourensanía 2021, segundo recoge el acta del jurado, “por toda una trayectoria vital y profesional dedicada al mundo del deporte, tanto desde la práctica personal como por su destacado papel en la defensa de la labor que realizan las federaciones deportivas, pero sobre todo como firme defensor del movimiento olímpico, lo que le valió el reconocimiento a su trabajo por parte del Comité Olímpico Internacional”. Manuel Baltar afirmó que, con este galardón, “reconocemos en Alejandro Blanco un ejemplo de los valores deportivos, el sacrificio, el afán de superación, el trabajo en equipo, y del compromiso con una tierra que fabrica medallas”. Hoy, señaló, “entras en una relación de ganadores del Premio Ourensanía con total justicia, uniendo tu apellido a otros ilustres de esta tierra como Barreiros, Pliego o Taín, porque, además de tu exitosa trayectoria nacional e internacional siempre exhibes con orgullo tu condición de ourensano”.
En el galardonado, destacó el presidente provincial, “vemos al gestor deportivo internacional, llamado para lograr consensos y solucionar conflictos, a la persona de concordia” que por quinta vez consecutiva va a liderar el Comité Olímpico Español. “Tenía que ser uno de Ourense”, dijo. Como persona distinguida “para que sigas siendo ejemplo de compromiso y bonhomía ourensana”, le pidió Baltar que “alumbres propuestas y apoyes las nuestras en el desarrollo del deporte en Ourense, en una provincia donde implantamos un ecosistema de turismo deportivo en el que tienen cabida desde la estación de montaña de Galicia, Manzaneda, hasta el Parque Náutico de Galicia en Castrelo de Miño; donde vienen selecciones internacionales de remo y piragüismo a preparar los Juegos Olímpicos y campeonatos internacionales; el Ourense capital del hockey en Galicia; la candidata a sede del Campeonato Europeo de Balonmano en 2028; al Ourense del ciclismo”. La una provincia, en definitiva, “de los clubes y deportistas que tantos éxitos y orgullo de por sí nos han dado durante toda la historia”. Y desde hoy, añadió “contigo la Ourensanía será más rápida, más alta y más fuerte”, haciendo así referencia al lema del olimpismo.
Ciudadano embajador de Ourense
Agradecido “por nombrarme como un ciudadano embajador de Ourense”, Alejandro Blanco recordó su historia de barrio en la capital, “feliz y despreocupado”, y como descubrió el cine en el propio Teatro Principal, asegurando que gracias a este premio crea “un nuevo vínculo con esta tierra, teniendo el privilegio pero también el deber de asumir este nuevo cometido, que prometo ejercer con orgullo, representando a Ourense a todos sus ciudadanos, en España y en el resto del mundo, al igual que represento al olimpismo en los 206 comités olímpicos del mundo”. Blanco invitó a los presentes a reflexionar sobre la trascendencia de la palabra ciudadanía “como identidad de ourensanos y de dos de sus más importantes valores: el trabajo y el esfuerzo”, subrayando que la Ourensanía “no tiene fronteras y junto con nuestra lengua, cultura y gastronomía es un patrimonio que debe ser compartido con el resto de la humanidad”. Apeló al futuro, pidiendo que se mantenga “el empeño de construir esa ciudad y una provincia termal, para dejar una herencia a las sucesivas generaciones y darles un motivo de orgullo para seguir ligados a esta tierra, de tal manera que vengan las oportunidades de trabajo, riqueza y prosperidad”, al tiempo que pidió a Manuel Baltar que persista “en su proyecto internacional, donde el deporte es un cómplice imprescindible”, ofreciéndose a trabajar juntos en este objetivo. Alberto Núñez Feijóo habló de la Galicia universal de Vicente Risco y los orígenes del movimiento olímpico señalando que ambas citas “tienen como común denominador al premiado, un ourensano ilustre sin cuyo nombre no se entiende el olimpismo español e internacional”. Alejandro Blanco, dijo, “es un compendio de esas virtudes que permiten que las sortijas olímpicas sean una bandera en la que nos podamos reconocer todos”.
Alejandro Blanco Bravo (Ourense, 1950), licenciado en Ciencias Físicas, está vinculado en el ámbito deportivo al judo, en el que es cinturón negro 7º Dan, además de entrenador y árbitro. Ocupó varios cargos directivos en esta disciplina, llegando en 1993 a la presidencia de la Real Federación Española de Judo y Deportes Asociados. Fue además uno de los destacados impulsores de la constitución en 2003 de la Confederación de Federaciones Deportivas Españolas. En septiembre de 2005 fue nombrado presidente del Comité Olímpico Español, siendo reelegido en 2009, 2013 y 2017, siendo el próximo 1 de diciembre cuando iniciará su quinto mandato. Blanco Bravo fue designado por el Comité Olímpico Internacional en diversas ocasiones como mediador para Sudamérica en la resolución de conflictos entre los comités nacionales y sus respectivos gobiernos. Elogiado por el propio COI por su trabajo, destaca también por la firme defensa de la independencia del movimiento olímpico y del deporte y del papel que representan las diversas federaciones deportivas.
