Los nacionalistas dicen no entender la decisión del concello y le piden que "recapacite".

El BNG de Ourense, denuncia la medida adoptada por el nuevo concelleiro del gobierno local del concello de Ourense, Telmo Ucha, quien comunicaba que al menos hasta el próximo mes de diciembre, las pulperías que tradicionalmente ocupan las calles de la ciudad todos los fines de semana  ya no podrán seguir haciéndolo.
El Grupo Municipal del BNG en el concello dice no compartir esta decisión, al tratarse de un sector que «representa una de las más hondas y arraigadas tradiciones de Ourense, al tiempo que nos identifica y nos hace únicos». Los nacionalistas dicen que esta es una tradición ampliamente seguida por cientos y cientos de ourensanos que tienen en las pulperías un referente gastronómico sobre de todo los fines de semana.
El BNG destaca que desde el estallido de la pandemia, este sector adoptó desde el primer momento todas y cada una de las medidas sanitarias impuestas y cumplió con todos los protocolos establecidos.
Para los nacionalistas los argumentos que se pueden esgrimir para su prohibición no son suficientes, ya que «estamos hablando de un sector que desarrolla su actividad al aire libre, donde es mucho mas fácil mantener las distancias de seguridad y cumplir con las medidas sanitarias», apuntan. Si el argumento es la concentración de personas, recuerdan desde el BNG, que el propio sector afirma trabajar bajo encarga, por lo que los tiempos de espera en los puestos es muy reducido, y además, inciden, si ese es el argumento, el gobierno local deberá tomar la misma decisión con otros muchos establecimientos en los que las colas en las calles para acceder a los locales son también una constante; y dicen que lo mismo ocurre en la propia Plaza Mayor para acceder al concello por parte de los ciudadanos que esperan para la realización de diversos tramites.
Por todo esto, desde el Grupo Municipal del BNG en el concello de Ourense, se pide al gobierno local, y en concreto al concelleiro Telmo Ucha, que reconsidere su decisión, y permita que las pulperías vuelvan a ocupar sus lugares en las calles de Ourense.

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