Dicen que mientras la concelleira de termalismo rechaza abrir las instalación termales por los “posibles riesgos que presentan para el contagio del COVID-19”, Xunta y Diputación están vendiendo” el termalismo de Ourense como “destino turístico seguro”.
Desde el partido Socialista de Ourense solicitan transparencia, y un plan de recuperación y dinamización seguro para la salud de las instalaciones termales de la ciudad, después de las contradicciones, según ellos, en las que cayó la concelleira de termalismo en la pasada Xunta de área. En dicha Xunta, la concelleira -Flora Moure- indicó a los diferentes grupos políticos que es posible, según algún estudio, que las aguas naturales no tratadas sean las que mayor riesgo presenten ante la pandemia que estamos sufriendo, y por este motivo “rechaza abrir las instalaciones termales” de la ciudad, que llevan precintadas y vacías desde el comienzo del Estado de Alarma. Ante tal argumentación, el grupo socialista solicita el “informe o estudio que avala las manifestaciones de la concelleira”.
Moure explicó que no “hablamos de agua de piscinas, ni son un balneario como tal, al no ser tratadas”, y pasó la “pelota” a la Xunta de Galicia, afirmando que “hoy con la pandemia se cree que las aguas saladas como la del mar pueden matar el virus, y las aguas frías también”, pero se cree que “las aguas calientes no tratadas pueden producir un efecto inverso y propagar o aumentar el virus”. Con todas esas premisas, la concelleira cree que las piscinas y fuentes termales no se abrirán.
El grupo municipal socialista dice mostrar su sorpresa, y ponen de manifiesto las “contradicciones entre el gobierno municipal y el gobierno provincial en la gestión del turismo termal”, dado que tras la realización de estas declaraciones por parte de la concelleira popular, ayer, el Presidente de la Diputación, José Manuel Baltar, presentaba una campaña bajo el lema “Ourense destino seguro”, cuya promoción subrayaba que “Ourense es una provincia perfecta para eso y con un valor añadido que no tienen otros territorios: nuestras aguas termales y nuestros balnearios», destacando la concesión de distintivos a los diferentes establecimientos que cumplan la normativa. Unas manifestaciones, aseguran los socialistas, a las que se sumaba la delegada territorial de la Xunta, Marisol Díaz Mouteira, al decir que «Confiamos en nuestro potencialidad como destino termal”.
Desde el seno del grupo socialista, se reclama que se hagan públicos, y que se les faciliten a los grupos, “los informes de los que habla Flora Moure”, por los que, según asegura, puede concluirse que los establecimientos termales deberían “tardar en abrir”.
Asimismo, solicitan que “se garantice la seguridad de los usuarios de las instalaciones termales, y que se transmita información clara y transparente sobre su uso”, una medida que los socialistas la llevan demandando desde el inicio del mandato y que en estos momentos consideran de “vital importancia”.
Finalmente, los socialistas añaden que las «ocurrencias» en el sector termal también deben finalizar aludiendo a la antigua cárcel de la ciudad. No es serio, subrayan, que dentro del gobierno municipal para unos sea balneario, para otros sede de la UNED, y para los que quedan “vaya Usted a saber que”.
